Me la recomendó un amigo y vaya si se lo agradezco. Minx es una grata sorpresa. Es de esas series menores de HBO en la que la plataforma confía tan poco que ni se molesta en doblar al castellano, la emiten en original con subtítulos. Una lástima (seguro que eso resta público), pero aunque no seas de leer subtítulos, merece la pena. Creo que desde The White Lotus, también de HBO y estrenada el verano pasado (por aquí dejé una reseña) no disfrutaba tanto una serie.
Está inspirada en la difícil puesta en marcha de la revista Playgirl (1973), la versión femenina de la archiconocida Playboy. Fuera complejos. Minx refleja un paso más en la lucha por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres con el erotismo de fondo tras los avances en liberación sexual de los 60’s.
Trama
¿Es feminista un anuncio de consoladores para mujeres? Esta y otras preguntas de calado respecto al feminismo, el heteropatriarcado y al rol de las mujeres en la sociedad es lo que se plantea Minx. Y lo hace de forma inteligente y divertida.
Los Angeles, años 70. Jocelyn es una joven optimista que lucha por poner en marcha su proyecto: una revista feminista para la liberación de la mujer, alejada de los magazines femeninos al uso que no hacen más que consolidar la hegemonía machista. El único editor que le hace caso es Doug, que tienes una editorial de revistas pornográficas para hombres. Doug intuye que las cosas están cambiando y quiere lanzar una revista erótica para mujeres. Le propone a Jocelyn publicar su revista si puede incluir fotos de hombres desnudos. Durante toda la serie, Doug intentará tirar el proyecto adelante y Jocelyn mantener su idea original lo más pura posible.
Personajes
Junto a Jocelyn y Doug hay personajes memorables. Shelly es la hermana de Jocelyn, y a pesar de ser un ama de casa madre de familia es mucho menos puritana que su hermana y la que la convence para tirar adelante. Bambi, actriz porno muy rubia pero mucho menos tonta de lo que gusta hacer pensar. Tina, la mano derecha de Doug y la que realmente dirige la editorial con más sentido común que su jefe, y Richie, fotografo latino gay con miedo a triunfar fuera del ámbito del porno.
La química que se establece entre Jocelyn y Doug sustenta toda la serie. Es un gran acierto la elección de los actores así como el enfoque que se hace del personaje de Doug. Tratándose de un hombre que se dedica al porno sería fácil caer en el estereotipo de tipo sórdido, machista, abusador de mujeres y nada más lejos de la realidad. Doug es un buscavidas, un canalla al que lo único le interesa es el negocio y ve posibilidades en el planteamiento de Jocelyn. Por otro lado, las oficinas de Bottom Dollar, la editorial pornográfica, son mucho menos sórdidas y mucho más divertidas de lo que cabría suponer. Resulta muy grato que una serie refleje el erotismo de una forma tan natural y desprejuiciada.
Otro de los grandes alicientes de Minx es la mirada femenina y feminista de la propuesta. Cada capítulo plantea cuestiones como la que abren esta reseña sobre los consoladores y muchas más relacionadas con la sexualidad femenina, y el papel de la mujer. Minx es una serie fresca, divertida y desprejuiciada (los desnudos frontales masculinos son cuantiosos), una joya el en abusivo panorama seriéfilo actual. No es una serie negra, pero es muy recomendable