Hace un par de semanas llegó hasta mí una de estas listas de recomendaciones que corren por la red. En ella aparecía Talión como la novela negra indiscutible del panorama actual. Así que ni corto ni perezoso, sobre ella me lancé
Tras un comienzo trepidante, admito que por momentos Talión me llegó a parecer muy absurda, e incluso estuve tentado a dejarla. Una vez acabada, puedo decir es que Talión me ha desconcertado, me ha descolocado. Y hoy en día, en el que las novelas (y los productos culturales en general) se parecen tanto unas a otras, ya es mucho.

Talión: sinopsis
Marta Aguilera es una chica pija y mona (supermonísima según insiste Santiago Díaz) a la que un día le detectan un tumor cerebral mortal. Los médicos le aseguran que le quedan dos meses de vida. Sin nada que perder Marta decide tomarse la justicia por su mano y cual Talión, vengar a algunos impresentables, depredadores sociales, que han logrado evadir la acción de los tribunales.
La inspectora Daniela Gutiérrez arrastra un pasado doloroso: veinte años atrás, su marido y uno de sus hijos fueron asesinados en un atentado de ETA. Junto a Sergio, su hijo superviviente, Daniela intenta tirar adelante sin que la memoria de ese brutal suceso acabe con ellos.
Marta se estrena en su carrera delictiva con Jonás Bustos, pederasta, violador y asesino de niñas que su abogado ha logrado liberar por falta de pruebas. A partir de ahí, su mente cada vez más perturbada, clamará venganza en una espiral de violencia mientras la inspectora Gutiérrez le pisa los talones.
Talión: comentarios
Como comentaba el principio, Talión me ha parecido desconcertante. Hay libros con una prosa más pulida y planteamientos más elaborados, pero dentro de un tiempo, el que recordaré será este. ¿Qué tiene Talión para resultar tan peculiar?
He llegado a la conclusión de que lo más subyugante de Talión es que tiene grandes aciertos y errores garrafales que mezclados ofrecen un producto de gran personalidad.
Talión sí
Entre los aciertos estaría el planteamiento. Ante la impunidad con la que actúan algunos delincuentes arropados por abogados sin escrúpulos y un sistema judicial con fisuras, ¿quién no ha sentido el pronto de tomarse la justicia por su mano? Es fácil empatizar con Marta Aguilera, la protagonista. (No es un arquetipo novedoso, el justiciero es un arquetipo recurrente utilizado por muchos autores a fin de criticar la sociedad. Me viene ahora mismo a la memoria la serie Dexter, protagonizada por un sádico psicópata que también se tomaba la justicia por la mano).

Otro de los aciertos de Talión es el espeluznante recorrido que hace de algunas de las actividades delictivas más terribles que aquejan la sociedad actual: la pederastia, la trata de blancas, el narcotráfico y el terrorismo. La descripción de estos delitos resultan unos de los grandes alicientes de la novela. El pasaje en el que Marta Aguilar visita la Cañada Real es realmente crudo y estremecedor. Resulta también admirable la valentía con la que Santiago Díaz afronta el espinoso tema de ETA.
Si la trama hubiera tocado la corrupción política (de la que habla de refilón) o la impunidad del sistema bancario podría considerarse realmente un reflejo del momento social que vivimos.
Talión no
El peor error de Talión es la pertinaz justificación moral que hace Santiago Díaz de su protagonista. Que si el tumor le provoca episodios de violencia, que si en su pasado vivió escenas conflictivas, que si en el fondo es muy buena y va regalando dinero a todo el mundo… Toda esta moralina me parece pueril e innecesaria. La trama ya nos tiene ganados a los lectores. Ya hemos comprado su planteamiento, no hace falta estar justificándola cada pocas páginas.
A nivel planteamiento, el giro médico de la trama a media novela, es absurdo además de inverosímil absolutamente. Se ve muy forzado y hace parecer a la comunidad médica como unos absolutos pazguatos.
Algunos personajes tienen pocos matices. Los buenos son muy buenos, los malos son muy malos. Dimas, el muchacho con síndrome de Down, es tan bueno y naif que resulta incluso ofensivo (además de empalagoso). A modo anecdótico, hay pequeños detalles que chirrían. La obsesión de Santiago Díaz porque todos sus personajes principales sean mujeres guapísimas resulta cómico. Los capítulos sexuales, se ven algo forzados y falsos también.
Talión: en resumidas cuentas.
LO MEJOR: El poso que deja en el lector. El planteamiento básico de la venganza, el ritmo.
LO PEOR: La justificación y la sorpresa médica a media novela.
LA PREGUNTA: ¿Se podría considerar Talión una novela reaccionaria o de ideología de derechas por el enfoque que adopta?
PUNTUACIÓN: 8/10
