Me vais a perdonar. Hoy tenía la intención de escribir un microrelato divertido para intentar arrancar sonrisas, tal como aconseja la OMS. Pero no me veo con ánimo.
Esta mañana he conseguido una mascarilla, una de esas que no protege mucho y con la que no harías nada minimamente arriesgado. Me la he puesto para ir al Mercadona y me he hecho una foto tonta que he subido a stories de instagram.
Esta tarde un amigo médico me ha dicho que con esa misma mascarilla él trata a enfermos con Covid-19 cada día en el hospital. Los osculta, los palpa, los calma. Personas con fiebres altas, que tosen, que lloran, personas con miedo que le agarran, que le imploran… No puedo ser consciente de lo que debe suponer saber que te envían a enfrentarte a un enemigo sin medios, armado solo de tu coraje y de tu buena voluntad, teniendo claro que, como poco, vas a ser infectado y con suerte serás de los casos asintomáticos o leves. Con mala suerte….
Un famoso con conciencia cívica pedía el otro día que por lo menos esta experiencia sirviera para que nunca más se vuelvan a hacer recortes en la sanidad. Que se prohiba por ley tocar el dinero destinado a la salud. A los políticos se les llena la boca de decir que tenemos el mejor sistema sanitario del mundo. Lo que tenemos son los médicos, enfermeros, celadores, etc, más sufridos y resignados del mundo, eso sí.
Sé que no sirve de mucho, pero esta tarde he aplaudido con más fuerza y con más ganas.
(Y prometo que el próximo microrrelato será más divertido)
Sobre guantes y mascarillas
Otro pequeño relato de los que se me ocurren, anécdotas que me suceden y / o comentarios sobre mi persona plasmados en menos de 200 palabras. Quién nos lo iba a decir, con lo tranquilos que estábamos (sin saberlo). Yes que en poco tiempo todos íbamos a llevar por la calle mascarillas y guantes. Sobre guantes y mascarillas
Espero que te guste.
Foto de Anna Shvets en Pexels